- No dejar agua estancada en fondos, patios o jardines para evitar la formación de criaderos de mosquitos.
- Eliminar los recipientes que puedan contener agua o, si son recipientes en uso como baldes o palangana, darlos vuelta. Si son otros como portamacetas o floreros, cambiarles el agua frecuentemente.
El contagio sólo se produce por la picadura de los mosquitos infectados. No se contagia de una persona a otra, ni a través de objetos o de la leche materna.
Ante la aparición de síntomas como fiebre, dolores musculares y de articulaciones, cansancio, nauseas y vómitos y manchas en la piel, es importante visitar al médico, no automedicarse ya que, además de «tapar» los síntomas puede generar reacciones adversas con el virus, beber mucha agua y hacer reposo.