Fundación Huésped publicó una investigación que demostró cómo la pandemia y las medidas de aislamiento social afectaron de forma negativa la salud integral de las personas trans y no binarias. El estudio se realizó entre mayo y junio de 2020 y sus resultados han sido publicados en el International Journal of Transgender Health.
A través de una encuesta, el equipo de investigación social de la organización, encontró que la mitad o más de las feminidades y masculinidades trans indicaron que tuvieron que interrumpir el tratamiento hormonal o no pudieron iniciarlo. Además, el 81,4% de las feminidades trans que respondieron indicaron que se redujo su trabajo y sus ingresos durante el ASPO.
El estudio también da cuenta de cómo se vio afectada la salud mental de esta población y la existencia de barreras en el acceso a los servicios de salud y a los servicios básicos. Los datos relevados refieren que más de la mitad (el 51,5%) de las masculinidades trans que participaron de la encuesta reportaron estar desempleados o no contar con un ingreso económico. En el grupo de las femineidades trans se detectaron las principales barreras en el acceso a vivienda, ayudas económicas, alimentos y productos de higiene/limpieza.
“La prolongación en el 2021 de la pandemia y las medidas de aislamiento social refuerza la necesidad de activar medidas enfocadas en las problemáticas que impactan en las feminidades trans, masculinidades trans y personas no binarias”, declaró Inés Aristegui, Coordinadora de Investigación Social de Fundación Huésped.
Las interrupciones en el tratamiento hormonal o la imposibilidad de iniciarlo representan un problema, ya que los procedimientos de afirmación de género de este tipo demostraron tener un impacto positivo en la salud física y mental de las personas trans. Además un 10% de quienes indicaron tener VIH no pudieron acceder al tratamiento.
Nadir Cardozo, referente de la comunidad trans y promotora de DDHH y salud de Fundación Huésped define que “uno de los problemas que la comunidad trans y personas no binarias enfrenta de forma cotidiana es la invisibilización de sus necesidades para acceder a un servicio de salud integral. Este estudio demuestra que la pandemia y las medidas sanitarias han profundizado las barreras que ya existían. Por eso es necesario poner en funcionamiento políticas públicas que aborden esta situación de inmediato.”
El grupo de personas no binarias encuestadas fueron las que en mayor medida experimentaron un impacto negativo en su salud mental. Más del 60% de las personas no binarias manifestaron haber experimentado niveles elevados de preocupación, soledad y tristeza y casi la mitad tuvo pensamientos suicidas. También fueron quienes más reportaron haber sufrido episodios de violencia y quienes tuvieron más dificultades para acceder a servicios de salud.
Frente a este panorama, Fundación Huésped junto a las organizaciones ATTTA Red Nacional y Asociación Civil Gondolin desarrollaron una serie de recomendaciones para fortalecer las políticas públicas dirigidas a la comunidad trans y no binaria. Se necesita garantizar los recursos materiales y humanos para la continuidad de los tratamientos de afirmación de género, antirretrovirales y otras especialidades médicas. Además de establecer protocolos para identificar a aquellas personas que requieran de asistencia psicológica o psiquiátrica de forma más urgente y así poder brindarles el servicio.
Estas acciones se deben llevar adelante en un trabajo articulado junto a las organizaciones que acompañan a esta población. Para esto, es importante promover la inclusión de navegadores/as pares en los servicios de salud para asistir, informar y facilitar el acceso de las personas trans y no binarias.
Podés ver el resumen del informe en este link o acceder al estudio completo acá.