Información para el autocuidado de la salud de mujeres trans
El acceso a la salud es un derecho. Recibir atención adecuada, respetuosa y libre de discriminación también lo es. Para cuidar tu salud, el primer paso es tener acceso a información sobre los riesgos que representan algunas prácticas comunes.
Conocé y decidí. Amá tu cuerpo.
Sobre los medicamentos:
Si tomás alguno de estos medicamentos y no te lo recetó ningún médico, te estás automedicando: hormonas, penicilina, ibuprofeno, clonazepam.
Cada cuerpo puede reaccionar de forma diferente a un mismo medicamento. Por eso, por más que:
Tengas síntomas parecidos a los de otra persona.
Una persona de tu confianza te haya aconsejado un medicamento.
Ya lo hayas usado en el pasado; a aunque a otra persona le haya hecho bien.
O hayas leído o escuchado que es muy bueno.
¡No te automediques!
La automedicación tiene riesgos. Puede:
Complicar una enfermedad.
Tener efectos no deseados.
Provocar una intoxicación.
Esconder otro problema de salud más grave.
Hacer que, cuando los necesites, los remedios no hagan efecto.
Sobre las hormonas:
Tomar hormonas sin prescripción médica también es automedicarse.
Tené en cuenta que puede causar:
Falta de deseo sexual.
Hinchazón de piernas.
Coágulos en la sangre.
Cáncer de mama.
Depresión, angustia, ansiedad.
Coágulos en la sangre.